Gracias, Lempira. Toda niña debería tener a alguien que dé gracias a Dios cuando se acuerde de ella y mil oportunidades más. Este Día Internacional de la Niña, queremos que conozcas historias de niñas que trascienden en sus comunidades.
Keily ingresó a los 12 años de edad a nuestro Programa de Patrocinio World Vision, en donde encontró a alguien que apoyaría en su bienestar y sueños. Esa persona es Kim, quien siempre llenó de oportunidades de Keily y su familia cuando lo necesitaban.
“Los primeros años que era tu patrocinadora no hice un buen trabajo en escribirte,” le escribió Kim a Keily. “Te enviaba dinero, pero Dios me hizo saber que eso no era suficiente. Él me dijo que necesitaba hacer más y me dijo que te ayudara a pagar tus estudios.”
Fue así como Keily comenzó a recibir un apoyo adicional para cubrir sus estudios. En cada carta intercambiada, Keily y Kim desarrollaban un vínculo cada vez más especial. Se compartían experiencias, oraciones, promesas bíblicas, fotos de sus vivencias, mensajes especiales de cumpleaños, navidad o simplemente expresaban lo agradecidas que están de compartir sus vidas.
Además de utilizar el dinero en sus estudios, Keily decidió invertir en una microempresa que su familia había iniciado hace algún tiempo.
“Este negocio genera más ingresos a nuestro hogar,” menciona Keily. “Con el apoyo que recibo de mi patrocinadora también hemos surtido la microempresa. Vendemos canela, condimentos y algunos productos para medicinas naturales. Mi hermana y yo lo empacamos en bolsas y después mis papás salen a venderlo en 16 comunidades.”
A sus 22 años, Keily está por graduarse de un bachillerato técnico en Salud y Nutrición Comunitaria. Sueña con estudiar en la universidad una licenciatura en enfermería y así devolverle a su comunidad un poco de lo que Kim ha sembrado en ella.
“Quiero dar mi apoyo a las demás personas,” menciona Keily. “Mi carrera me permitirá ir a las comunidades, relacionarme con las personas y ayudarles. Además, quiero salir adelante por mi familia, son mi motivación.” Al igual que ella y todos las niñas de la comunidad de Gracias, Keily merece #MilOportunidades
